"Con las manos en la masa"

CANALIZACIÓN

Mayo 2025

«No dejes que te inquieten las noticias o el entorno. Céntrate en ti mism@, en alinear tu mente, tu corazón, en ordenarte a ti, y en ser ejemplo de amor, de colaboración y de alegría en tu entorno»...    


ESCUCHA AQUÍ:


Queridos amigos, bienvenidos una vez más, os echábamos de menos. Gracias por abrir una vez más este espacio-tiempo para poder reunirnos, para hacernos presentes en vuestra vida. Recordaros una vez más que sois seres de luz poderosos, que no sois simples cuerpos físicos con una mente; sois mucho, mucho, muchísimo más. Sois una consciencia eterna, viajera, a través del tiempo y del espacio, a través de las eras. Sois una consciencia multidimensional. Y aunque vuestra actividad consciente se limita a este plano que habitáis en este momento encarnados, a menudo podéis tomar consciencia de otros planos, desde el sueño o desde la meditación. Es solo una cuestión de práctica y de abriros a esa idea, de poner esa intención para poder percibir esas otras líneas y planos en los que también habitáis.

¿Por qué es tan importante, entonces, este plano aparentemente reducido, denso, parcial, respecto a los demás? Porque precisamente sanando vuestras partes heridas es donde podéis expandiros y seguir creciendo. Por eso, vuestra consciencia tiene interés en llegar a este plano al que le cuesta mucho llegar, por cierto. Es un gran esfuerzo para la consciencia poder materializarse en un plano tan denso, una vibración tan baja de la luz. Y este esfuerzo lo hacéis precisamente para tomar contacto con esas heridas, con esas emociones que a menudo os embargan y que os cuesta tanto controlar, incluso a veces reconocer o aceptar.

Sin embargo, vosotros intentáis ir hacia los planos de luz, echáis de menos el sentido de unidad y de formar parte de estar en red, porque es vuestro estado natural: estar conectado, sentir esa conexión con todos. Y en este plano os sentís muy aislados. Es totalmente falso, no lo estáis. Seguís conectados, seguís siendo red, pero es cierto que vuestros sentidos están muy limitados y os engañan. Sin embargo, si vais al corazón, podréis, conectando con vuestro corazón, sentir esa energía del amor y de la conexión con todo lo que os rodea. Con lo animado y lo inanimado, con otros seres humanos; por supuesto, con las plantas, los animales, los minerales. Incluso podéis sentiros conectados, por supuesto, con el planeta Tierra y con el universo. Y con muchos de esos seres intraterrenos que ayudan al planeta a mantenerse en equilibrio, como las hadas, los duendes, los gnomos y un largo etcétera. Ellos llevan eras trabajando incansablemente para que Gaia siga viva, siga sana, a pesar de vuestras acciones.

Hoy, vuestra consciencia ha crecido. La humanidad entra en su juventud y en una etapa mucho más madura. Y por eso podéis llegar a conectar con estos seres si lo hacéis desde el amor, y podéis llegar a sentirlos y a ver sus señales, o incluso a ellos.

El universo se encuentra inmerso en un momento de transformación, de cierre de ciclos para abrir otros nuevos. Eso implica mucho trabajo a todos los niveles: físico, mental, emocional, energético, espiritual. Durante mucho tiempo habéis podido cerrar los ojos a esas transformaciones, a esas necesidades, pero hoy ya no es posible. El cierre ha llegado; el tiempo, digamos, que se ha agotado, así es que no vais a poder evitarlo. Si acompañáis esos cierres de manera consciente, serán mucho más leves y fáciles de realizar. Y si intentáis ignorarlos, negarlos, vivirlos desde la falta de consciencia, lo haréis a través del dolor y del sufrimiento físico, mental y emocional. Esta es una elección de cada uno de vosotros en función del nivel de consciencia en el que os encontréis en este momento. Y también estos cierres precisamente servirán de llave para despertar a muchos. La humanidad, a nivel colectivo, también está inmersa en este proceso. Por eso vivís tiempos muy convulsos a nivel político internacional. Pero, a diferencia de otros momentos históricos, hoy el nivel de consciencia de la humanidad es suficiente como para que por fin las cosas se resuelvan de otro modo.

Así es que seguid visualizando un mundo mejor, seguid ordenando vuestra propia vida desde el amor, desde la colaboración, y seguid siendo ejemplo para vuestro entorno. Lo único que te pedimos, y lo único que puedes hacer, es trabajar por y para ti mism@. Alinear tu propia realidad. Alinearla con tu Ser Superior. Actuar desde el corazón. A veces venís con la inercia de un periodo en el que la mente ha sido el motor, pero eso se ha terminado. Ahora el motor es el corazón, que es el que os conecta con vuestro Ser Superior y con otros planos, a través de vuestra glándula pineal.

Así es que os pedimos que imaginéis una esfera de luz dorada en vuestro corazón, que se activa de manera luminosa e intensa, como un gran sol, que ilumina vuestro pecho. Imaginad cómo esa luz crece en tamaño y en intensidad, cómo calienta vuestro corazón, llenándolo de paz, de bienestar. Todo está en su lugar. Es el momento de perdonaros por los errores cometidos, que no fueron otra cosa que aprendizajes necesarios y, por tanto, fueron adecuados. Incluso puedes perdonarte por los errores que vendrán, porque también serán adecuados. Quédate con los aprendizajes que te traerán. Y perdona a los demás, que de igual modo andan ciegos a veces y no son capaces de ver más allá y, como tú, yerran a menudo. Envuelve todo en amor: tus errores y los de los demás. Abrázalo con compasión, como harías con el error de un niño pequeño que está aprendiendo. Y, de igual modo, abrázate y entrega ese dolor, esa culpa, al universo. Y libérate, porque hoy eres más sabio, más sabia. Y estás dispuesta a intentarlo de nuevo con un mejor enfoque.

Y vuelve a imaginar esa esfera de luz en tu corazón que sigue creciendo: ligera, liviana, brillante, y te envuelve completamente. Imagina cómo de esa esfera salen dos rayos: uno hacia el centro del abdomen, hacia tu plexo solar, que también se activa, llenándote de equilibrio y de poder personal. Imagina cómo esa esfera en tu abdomen gira, crece en intensidad y limpia todas las memorias que guarda tu intestino. Y cómo tu intestino se renueva, se llena de luz. Esas memorias se excretan a través de raíces que te conectan con el centro de Gaia, de la Madre Tierra. Y con la mano sobre tu abdomen puedes expresar: "Yo Soy. Aquí y ahora me permito avanzar hacia mi nueva versión, una versión más consciente y más alineada con mi Yo Superior. Me devuelvo mi poder y me permito ser yo mism@, porque me respeto y me amo."

Y ahora vas a imaginar un rayo de luz dorada que conecta tu corazón con tu glándula pineal en el centro de tu cerebro. Vas a imaginar una esfera de luz dorada en tu cabeza, como otro gran sol. Sientes cómo tu cabeza se llena de luz, de ligereza, de tranquilidad. Y puedes visualizarte feliz, en plena felicidad, en plena paz contigo mism@, en plena armonía. Y esos rayos siguen creciendo y conectan tu pineal con el centro del universo y conectan tu plexo solar con el centro de la Tierra. De manera que eres una columna de luz que une el Cielo y la Tierra. Y puedes sentir cómo la energía del Cielo y de la Tierra llega hasta ti, hasta tu corazón, a través de esos rayos, de esa columna. Y te llena de nueva información, renovándote, llenándote de energía, nutriéndote.

Y puedes decir: "Aquí y ahora elijo ser mi mejor versión, la más alineada con mi Ser Superior. Elijo colaborar y compartir mis dones, y abrazar mis partes en desarrollo con paciencia y con amor, para permitir que sigan mejorando poco a poco."

Siente cómo tu luz, tu energía, crece. Y resplandeces como una estrella llena de vida y de energía. Imagina ahora cómo esa estrella que eres, a través de cientos de rayos de luz, se conecta con cada ser de tu entorno: familiar, laboral, tu ciudad, tu Tierra, el universo. Y siente cómo el amor de la Fuente Primigenia recorre esa red y llega hasta ti; cómo ese amor de la Fuente lo inunda todo. Y visualiza la Tierra así, conectada en red, recibiendo todo ese amor. Visualiza la humanidad como una gran red en conexión, y el amor circula a través de esa red. No hay país, no hay fronteras, no hay idiomas. Solo hay seres humanos compartiendo y aprendiendo unos de otros. Como las flores del campo, que lo llenan de belleza con su diversidad. Así sois los seres humanos. Y eso es mostrar diversidad.

Y ahora vuelve a respirar. Y como polvo de estrellas cae suavemente sobre tu cuerpo, vuelve a sentir tus manos, tus pies, tus hombros, tus pulmones llenándose de aire. Y vuelve a sentir que estás aquí y ahora precisamente para poder transformar la Tierra en Cielo, para poder transformarte a ti mism@ en tu mejor versión.

No dejes que te inquieten las noticias o el entorno. Céntrate en ti mism@, en alinear tu mente, tu corazón, en ordenarte a ti, y en ser ejemplo de amor, de colaboración y de alegría en tu entorno. Eso es lo mejor que puedes hacer por la humanidad y por ti mismo.

Desde los planos más elevados os enviamos todo nuestro amor y toda nuestra energía para ayudaros en este momento tan importante para todos, porque lo que vosotros materializáis afecta a todos los planos.

Así es que gracias por vuestro esfuerzo. Gracias por estar con las manos en la masa. Os amamos y os bendecimos. Hasta pronto, amigos.


MAESTROS, GUÍAS Y SERES DE LUZ 

a través de Pilar González


Comentarios