"Sois jardines"
Bienvenidos, amigos, un día más. De verdad nos alegra el corazón encontrarnos con vosotros, nos llena de felicidad. Gracias por crear estos espacios de encuentro. Por parar un ratito en vuestras vidas y compartir con nosotros este momento.
Cultivad la alegría en vuestros corazones ahora que tanto la necesitáis. El corazón es como un huerto y podéis cultivar lo que necesitéis que os alimente. Podéis cultivar la ilusión, la alegría, la esperanza, el amor, la confianza, todo eso que tanto ansiáis, podéis cultivarlo para que os alimente. Ya os hemos hablado muchas veces de cómo hacerlo.
Es simplemente pararos a lo largo del día, cuando lo necesitéis, cuando os sintáis agotados, malhumorados, con ansiedad, paraos y respirad, simplemente respirad y sentid cómo el aire entra y sale de vuestros pulmones. Centraros en eso simplemente, en cómo el aire entra y sale. Y después visualizad cómo ese aire está cargado por la energía Divina, la energía de la Fuente. Podéis visualizar los átomos de esa energía flotando en el aire y cómo se activan, se iluminan y entran por vuestra nariz llenando vuestros pulmones. Podéis sentir cómo esa energía amorosa de Dios, de la Fuente, del Universo, como queráis llamarlo, se transmite a vuestros pulmones, los inunda con su ligereza, con su paz, con su bienestar… Y recreaos en eso tanto tiempo como necesitéis. Y luego visualizad como esa luz se expande a vuestro corazón y de ahí a todas vuestras células hasta que todo vuestro cuerpo resplandezca. Luego esa luz se expande más allá y os envuelve de forma protectora y amorosa.
Esto es tan sencillo y os puede ayudar tanto a mantener vuestra energía de forma adecuada, a limpiar vuestros cuerpos energéticos.
Y luego recordad dedicar espacios de tiempo a hacer cosas que os gusten. Esas cosas que os hacen perder la noción del tiempo: manualidades, jardinería, pintura, música, bailar, leer, o ver una película; pero una película que os recargue que os haga reír, que os lleve a mundos fantásticos, que os retorne a la infancia o a momentos felices. Podéis crear cuentos, historietas... Las cosas más sencillas son las que alimentan el alma. O simplemente pasear, si es por un espacio verde mucho mejor.
Pues de la misma manera que cuidáis vuestras plantas, deberíais cuidar vuestra energía, vuestro corazón y dedicarle esos ratitos diarios. Ya veréis que 5 minutos pueden recargaros enormemente. Realmente no es una cuestión de tiempo, es simplemente crear el hábito. Pero tampoco debéis sentiros mal si os olvidáis de hacerlo, simplemente intentad tenerlo cada vez más presente y hacerlo siempre que os venga a la mente; siempre que sintáis que estáis cansados o decaídos poned en marcha esa visualización de la energía.
O podéis visualizar cómo una ducha de luz os empapa y os recarga. Puede ser una luz dorada, verde, morada… simplemente dejad que fluya un color y sentid cómo os envuelve y os empapa. Podéis incluso hacerlo como un juego. Es tan sencillo que os parece que no puede ser eficaz, pero lo es.
La energía se mueve simplemente con vuestra intención, simplemente con vuestra atención. Intentad empezar a poner más atención en cada cosa: cuando coméis, atended a esos alimentos, agradeced que os prestan su energía, visualizadlos cargados de todas las vitaminas y nutrientes que necesitáis y agradeced que así sea. Cuando bebéis agua imaginad que es agua de manantial, que es un agua viva, fresca.
Vuestra atención cambia la energía de las cosas, ayuda a transformarla y de esa forma podéis ayudaros a vosotros mismos a mejorar vuestra salud y a mantenerla mucho más estable y fuerte.
El simple hecho de imaginar vuestros órganos sanos, fortalecidos, nutridos les ayuda a que así sea.
El canto es algo que tiene un gran poder. El sonido ayuda a equilibrar la energía y al organismo. Os animamos a ser creativos, a cantar, da igual si juzgáis que lo hacéis bien o mal, a lo que os animamos es a no juzgaros, simplemente hacerlo.
El chakra de vuestra garganta, de la comunicación y de la creatividad se fortalecerá y será muy positivo para vosotros. Dejad que surjan simplemente tarareos y permitid que crezcan y se desarrollen, cuanto menos lo penséis más potentes serán.
La música es el lenguaje del alma, ayudad a expresarse a vuestra alma. Ese tarareo os relajará y os ayudará a cambiar vuestra energía y a conectaros con vosotros mismos, con vuestro Yo Superior. Es una forma sencilla de “meditar”, de ayudar a la mente a estar entretenida y permitir que os conectéis más fácilmente.
Y una vez más queremos recordaros el poder de vuestra imaginación. Vuestra imaginación es creadora, utilizadla en positivo. Imaginaos felices, libres, plenos; imaginad el mundo que realmente queréis. Las relaciones que realmente queréis, el trabajo, el hogar, el paisaje, imaginad vuestro mundo ideal, vuestro “yo” ideal, porque la imaginación es el primer paso para empezar a crear.
Y conectaos con Gaia, con la Madre Tierra. Visualizad cómo de vuestro corazón sale un rayo de luz que se conecta al corazón de Gaia. Sentid su fuerza, su vitalidad, dejad que os nutra. Agradecedle que os cuida y os mima, que os sustenta. Y visualizadla también espléndida, exuberante; como un jardín maravilloso lleno de abundancia, de aguas limpias. Y por supuesto, cuidadla. Intentad ser responsables con vuestro consumo. Intentad reducirlo para reducir vuestro impacto sobre Gaia.
Y si este verano visitáis el mar… bueno, eso es maravilloso para equilibraros. El mar es como volver al útero materno, al líquido amniótico. Un baño en sus aguas es reconstituyente. Igualmente cuidad la playa, el mar. Sed respetuosos con cada criatura que podáis encontrar, porque todas están colaborando con vosotros. Forman parte de Gaia, y vosotros también. Vuestro bien es su bien y cuando les hacéis mal, os hacéis daño a vosotros mismos.
Sentid como formáis parte del Todo, del planeta y del cosmos. Sois como una célula de ese gran organismo que es Dios, que es el Universo. Pero igual que para vosotros cada célula es importante porque una sola célula que enferme os afectará, vosotros sois igualmente importantes para Gaia y para el Cosmos, y si vosotros estáis saludables contribuís a la salud del Todo. Si estáis felices contribuís a la felicidad del Todo. Si estáis en paz contribuís a la paz del Todo y ahí es donde radica vuestro poder. Por eso, cuidando de vosotros mismos, cuidáis del Todo. Lo más eficaz y lo más importante que podéis hacer es ser felices, sentir y crear la paz dentro de vosotros, porque eso se trasladará al Todo.
Así es que acordaos de que sois jardines y que tenéis que sembrar en vosotros mismos lo que queráis que florezca; y de que tenéis que hacerlo a diario, cuidarlo a diario, cultivar a diario la paz, la alegría, la ilusión, la confianza, el amor.
Ante cada duda que os surja siempre tenéis que preguntaros lo mismo: ¿qué decido, actuar con amor o actuar con miedo? ¿actuar con confianza o actuar con miedo? ¿qué quiero sembrar? ¿qué quiero que crezca en mí y que florezca?
Nosotros sabemos que sois tierra fértil, que sois jardines maravillosos, solo falta que lo sepáis también vosotros. Que os descubráis a vosotros mismos, vuestro poder.
Pero no hace falta que lo creáis, simplemente probadlo, experimentadlo, intentadlo. Cada día un pasito. Cada día sólo un pasito. Eso es lo que os pedimos.
Mucho ánimo jardineros. Regad con amor, con confianza y con ilusión.
Os amamos. Hasta pronto.
Maestros, Guías y Seres de Luz
a través de Pilar González